Disfrutar del turismo rural en Burgos también significa conocer la parte más medieval de la provincia. Una parte que todavía se conserva en algunos pueblos que hoy nos muestran la tradición y el encanto de antaño. Hoy os queremos proponer una ruta por los pueblos medievales más bonitos que comprende la provincia.
Burgos es una de esas provincias en las que podemos encontrar todo tipo de propuestas de turismo, como visitas a pueblos que se encuentran dentro del ranking de los más bonitos de España. También porque hay otros lugares que todo el mundo debería conocer, como la Catedral, uno de los monumentos más importantes del país.
Y porque desde una de sus calles centrales, la espada del Cid señala a todos esos lugares que parecen haberse anclado en el tiempo, pueblos medievales en los que no es extraño escuchar el rumor de trompetas y tambores contando historias pasadas que componen la nuestra.
Peñaranda de Duero
La historia de este pueblo comienza en el siglo XI, momento en que los cristianos fundaron un castillo desde donde observar el avance del pueblo musulmán. Se concibe como un asentamiento defensivo, donde no se cedería ni una pizca de terreno. En torno al castillo se construyen posteriormente la Plaza Mayor y una abadía, hasta desarrollar todo el pueblo que se conserva hasta la actualidad prácticamente como el primer día.
Mahamud
Prueba de que este pueblo ha sabido resistir al paso del tiempo es su nombre, que aún se conserva de su época árabe y que hace honor a uno de los personajes más importantes y queridos de su historia.
Lo que vas a poder encontrar en un paseo por sus calles es una estructura medieval en la que destaca la Plaza Mayor, que tiene su origen en el siglo XIII y que también acoge la iglesia de San Miguel de Mahamud, principal punto de culto religioso en la zona. Seguro que también te llama la atención su Rollo Jurisdiccional, una belleza en mitad de la plaza.
Caleruega
Este pueblo de la Ribera del Duero se hizo especialmente conocido a raíz del nacimiento de Santo Domingo de Guzmán, personaje que incluso tiene su propio monasterio. Durante todo el siglo XII, mismo año de nacimiento de dicho personaje, se crean además otros lugares muy destacados, como la iglesia de San Sebastián o el monumento al labrador.
Oña
Este pueblo cuenta con un montón de rincones para visitar que tienen un gran valor cultural y que son el resultado de la importancia que tuvo durante la Edad Media.
Durante esta época se construyeron numerosos monumentos y edificios que le sirvieron más tarde para ser declarada Bien de Interés Cultural. Algunos de los que no te puedes perder son el Monasterio de San Salvador, una construcción religiosa que data del siglo XI, así como también la iglesia de San Juan y ¡hasta un palacio!
Lerma
Villa que se ha ganado a pulso el lema de medieval, por la forma en la que se mezclan las construcciones más antiguas con las modernas, llegando al punto de haber sido nombrada Villa Conventual y Cortesana del siglo XVII. Es un pueblo que conserva de la época medieval el puente Arco de la Cárcel, algunas casas y monumentos de mayor importancia domo el Palacio Ducal, situado en pleno centro de la Plaza Mayor.
Frías
Esta localidad, al igual que en el caso de Peñaranda de Duero, comienza su historia tras la construcción de un castillo que se ha conservado hasta la actualidad. Es un lugar que destaca por su temperatura, baja durante la mayor parte del año. Sin embargo, aquellos valientes que estén dispuestos a retar al frío, descubrirán un lugar de gran belleza con interesantes monumentos para descubrir, como la Iglesia de San Vicente o las Casas Colgadas.
Covarrubias
Esta villa adquiere una especial importancia en la historia por las figuras que se ligan a ella, como el noble cristiano Fernán González, quien luchó junto al Cid en muchas de las más importantes batallas que se siguen relatando hoy en día. Quizá por eso sus restos descansan en la Colegiata del pueblo y otros monumentos llevan su nombre, porque los habitantes actuales son conscientes de todo lo que deben a este ilustre vecino.
Poza de la sal
Pueblo declarado Conjunto Histórico-Artístico, que prácticamente linda con el País Vasco. Además de todos sus reductos medievales, como la iglesia de San Cosme y San Damián o el Convento de San Berdardino de Siena; es un lugar que destaca por las salinas que se pueden visitar en los alrededores. Otro de esos lugares que se conservan especialmente bien, para dar la sensación a los visitantes de que han retrocedido en el tiempo, hasta quién sabe si una época mejor.