Una de las opciones para aquellos que se quedan en Madrid, es disfrutar de la naturaleza en estado puro, y conectar con el medio natural que nos ofrece la provincia.
Si sois aventureros y queréis conocer lugares nuevos, o redescubrir la magia de algunos que ya habíais visitado, no dudéis en tener en cuenta este plan que os proponemos hoy, donde os llevamos por un sendero en el que las vistas son…bueno, mejor os lo describimos ahora.
¿Preparado? Nos vamos a hacer una ruta de senderismo por La Pedriza, uno de los caminos preferidos en Madrid.
¿Qué tiene de especial La Pedriza?
Si decides emprender una ruta de senderismo en esta zona, debes saber que lo hagas con quien lo hagas, tienes opciones.
Es decir, La Pedriza se ajusta mediante sus rutas, a cualquier tipo de visitante, contando con rutas de nivel fácil, y otras tantas de niveles más complicados para los más expertos.
Además, no hace falta que programes de antemano cuál es la ruta que quieres seguir, ya que a medida que avances, vas a encontrarte con alternativas que pueden hacer cambiar tu rumbo, en función de la energía que tengas.
¿Qué voy a encontrar en La Pedriza?
Pues a grandes rasgos, uno de los mejores paisajes que imagines, y espacios en los que la montaña típicamente grisácea, y las zonas verdes se unen.
Además, se encuentra en la Sierra de Guadarrama, donde se estructura como uno de los conjuntos de roca granítica más grande de Europa, lo que le hace ser muy especial.
Estas rocas además, tienen una silueta redondeada, casi parece pulida, y adornada con los arroyos y las zonas verdes de sus llanos en la parte más baja.
Se forma en tres bloques que son el Arcornocal, la Pedriza Anterior, y la Pedriza Posterior, que son el hábitat del buitre y las cabras montesas, dos especies características de la zona.
Comenzamos la ruta
Hay muchas opciones para hacer senderismo como decíamos antes, aunque la que nosotros hemos elegido hoy, es la que se denomina El Laberinto.
Se suele hacer en unas 7 horas, y su dificultad es media-alta.
Una vez que llegues al parking de Cantocochino, comienza tu aventura. La bienvenida te la da el Puente de Manzanares, con un camino de una media hora en la que has tenido que atravesar el río.
Una vez aquí, hay que coger el sendero que nos indica El Tolmo, del que parte otro más pequeño que te llevará hasta un pequeño riachuelo. Aquí empieza la marcha.
Desde este punto, comienza una subida que aunque no es muy pronunciada, sí se nota. Es un camino perfectamente señalizado en el que puedes descansar a la sombra del robledal que os acompaña. Aquí, encontrarás un camino hacia la derecha por el que trepar, hasta el Hueso, y posteriormente a la Butrera. Es el paso inicial hasta llegar al Laberinto.
Aquí da comienzo la verdadero ruta, así que bebe agua, coge fuerzas, y a disfrutar. Recorrer el Laberinto implica trepar, arrastrarse, y agarrarse fuerte por lugares algo más estrechos de lo normal, que te obligarán a quitarte la mochila. Es duro, ¡pero muy divertido!
Además, superar este tramo, tiene una recompensa: la pradera a la que llegas, donde es fácil encontrarte con los buitres. ¡Fin de la subida!
Ahora te toca bajar, y te recomendamos hacerlo por el Collado de las Dehesillas; con pendiente pero sencilla para el descenso. Está perfectamente señalizada por lo que no te perderás. La meta: de nuevo el parking.
¡Ya has hecho una de las mejores rutas de La Pedriza!