Cualquier aventurero que se precie sabrá qué es la Ruta 66, e incluso, alguno de ellos la habrá recorrido.
Si eres de esos que tienen en la lista de cosas pendientes que hacer este trazado, entonces tenemos buenas noticias para ti. Incluso si piensas que los 4.000 kilómetros que unen Chicago y Los Ángeles te quedan bastante lejos.
Pues sí. No nos hemos vuelto locos. Puedes disfrutar de esta ruta sin salir de España. ¡Te presentamos la versión ibérica de la Ruta 66! ¿Cómo te has quedado?
Si ya te han entrado ganas de hacer la maleta y ponerte en marcha, no tardamos más en contarte de qué se trata.
El recorrido
Nuestra versión de la famosa ruta estadounidense la encontramos a través de la Vía de la Plata.
Une Gijón y Sevilla aunque muchos de los aventureros que han decidido hacerla han añadido una parada en un lugar que merece la pena: Santiago de Compostela.
Son siete las provincias que se pueden conocer a lo largo de los más de 800 kilómetros que tiene. Y todas ellas en diferentes comunidades como son Andalucía, Extremadura, Castilla y León y Asturias.
Cómo hacer la ruta
Puedes hacerla de cualquier forma en la que creas que vas a poder aguantar. Puede ser a pie, en bici, en coche o con tu moto. Como prefieras disfrutar de la experiencia y de las vistas.
Lo suyo, para asemejarse completamente a la Ruta 66, sería hacerlo en moto o coche, disfrutando así de los trazados de las carreteras.
Todo el recorrido en conjunto duraría aproximadamente unos 3 días sin parar. Pero para disfrutarla a fondo, parando en alguno de los puntos clave, haciendo las fotos de rigor para dar vidilla a vuestro Instagram, el tiempo estándar es una semana.
Un plan perfecto para estas vacaciones.
Qué rincones voy a poder encontrar
En Sevilla está claro. Si tu punto de inicio es esta provincia, entonces no puedes dejar de conocer la Torre del Oro, la Giralda o la Plaza de España. Todos ellos son emblemas absolutos de la ciudad.
En la provincia de Cáceres, según se va avanzando, Los Barruecos te esperan en el pueblo de Malpartida de Cáceres, un monumento natural que consiste en rocas talladas por la acción del viento y el agua, dejando curiosas formas.
Astorga puede ser otra de las mejores paradas. Uno de los puntos clave para la cultura, ya que cuenta con un montón de restos romanos.
Gijón. Puede ser el final de tu ruta, o el principio, lo que tú decidas. En cualquier caso, te espera la playa de San Lorenzo, y por supuesto, su casco urbano cargado de encanto y elementos que merecen la pena una visita con calma.