Sabemos que te apetece disfrutar de las vistas de la playa pero, en esta ocasión y después de todo lo que hemos vivido, vamos buscando destinos que no estén masificados para disfrutar del turismo cerca del mar, y sin masificaciones para evitar cualquier riesgo.
Combinar un destino junto a la costa y en un ambiente tranquilo no es tarea fácil, y es que todos solemos, cuando el calor empieza a apretar, migrar hasta pueblos junto al mar que nos hagan vivir un verano de los de antaño, ¿verdad? Pues en esta ocasión puedes estar tranquilo, y cuando decimos tranquilo, lo decimos de verdad.
Te vamos a facilitar la tarea de buscar esas zonas poco concurridas en las que el agua del mar también es protagonista y seguramente, encuentres tu destino estrella para toda la vida.
¿Te apetece venir a un viaje tranquilo por los pueblos costeros menos masificados? No pierdas de vista los que vamos a enseñarte ahora.
¡Que disfrutes de la playa y….del silencio!
O Vicedo (Lugo)
Las vistas de este pueblecito son impresionantes, no es de los más conocidos de la comarca de A Mariña Occidental, por lo que es ideal para que puedas disfrutar de una jornada de playa sin grandes aglomeraciones. Otra de las maravillas de este pueblo es que cuenta con un montón de rincones que visitar, para cuando te canses de la playa.
El Puente Medieval do Porto o la iglesia de Mosende son algunos de ellos, y podrás conocerlos en un paseo al atardecer con las vistas del mar de fondo.
También se puede disfrutar de la isla de Coelleira, conocida porque se pueden avistar numerosas aves.
Port Saplaya (Valencia)
Parece imposible disfrutar de la tranquilidad en un pueblo de Valencia ¿verdad? Pues es lo que vas a poder disfrutar dentro de esta tranquila zona residencial que pertenece a la zona de Alboraya.
Su belleza y relación con el agua le han llevado a ser conocida como la Pequeña Venecia. Y es que esta pequeña población regada por las aguas del Mediterráneo te transportará al mejor de los destinos para disfrutar de la playa.
Imagínate tumbado en la arena, o dando un paseo junto al puerto, que separa estas playas con encanto. ¡No te lo puedes perder!
Alcossebre (Castellón)
Este tranquilo y agradable pueblo de la provincia de Castellón te ofrece un mix perfecto: playa y montaña en un entorno en el que disfrutarás de las buenas vistas desde prácticamente, cualquier rincón.
Por un lado, podrás conocer la Sierra de Irta, con su punto más alto en la ermita de Santa Lucía desde la que puedes divisar prácticamente todo el pueblo.
Cuenta con varias playas grandes, y calas en las que también podrás disfrutar de una jornada con tu mascota, o haciendo nudismo. ¡Un pueblo para todos los gustos!
Aunque no está masificado, cada vez está cogiendo más fama así que, si quieres disfrutar de su encanto, ¡date prisa!.
Fornells (Menorca)
Descubrir la esencia de la isla de Menorca es posible desde este pueblo en el que podrás aprovechar su esencia marinera en todos sus rincones. Tradicionalmente de pescadores, el pueblo ha sabido combinar elementos para el turista, con la tranquilidad y el estilo de vida pausado de sus habitantes.
Se localiza en la costa norte de la isla, y consta de varias playas así como calas vírgenes en las que tumbarte para disfrutar del sonido del mar de fondo. ¡No te olvides de meter la toalla en la maleta!
Y como colofón a tu viaje, no puedes irte sin probar su caldereta de langosta, una delicia de sus cocinas que hará que disfrutes al máximo de la experiencia en este tranquilo pueblo lleno de tradición y ricos sabores de sus productos frescos.