España es natural. Y lo demuestra y justifica con la mejor prueba posible: 15 Parques Nacionales que son, sin duda, parte de nuestro mejor patrimonio. El primero de ellos nació el 22 de julio de 1918, que fue, es y serán los Picos de Europa. Y a partir de él, otros catorce más, hasta la Sierra de Guadarrama, el último en declararse como tal en el año 2013.
Sin duda, nuestros Parques Nacionales son una parte importante del turismo rural, que incentiva a disfrutar la naturaleza, su tranquilidad, su paz, su inmensidad y también su fauna. Por ello, es labor de todos proteger su valor con el paso del tiempo, para que nuestro país siga siendo lo que es, natural. Vamos a conocerlos uno a uno.
Aigüestortes i Estany
Aigüestortes i Estany de Sant Maurici
El único que encontramos en Cataluña, más concretamente en la provincia de Lleida, en el corazón de los Pirineos. Su encanto reside en el contraste creado entre las montañas y los lagos, pues cuenta con más de 80. Se divide en dos zonas diferenciadas por su clima, a saber, la oriental, con climatología continental, y la occidental, con clima atlántico.
Señalar que el Parque tiene un gran valor biológico, debido a los diferentes ecosistemas que se presentan motivados por los desniveles de su orografía.
Archipiélago de Cabrera
Archipiélago de Cabrera
De carácter marítimo – terrestre, situado en las Baleares, regala un grado elevado de naturaleza virgen. Esto se debe a su aislamiento, y también por ser el menos visitado, lo que motiva que conserve hoy su paisaje prácticamente inalterado, lo que es sin duda, un aliciente en su valor.
Su riqueza no solo se presenta en el litoral y orografía, sino también en su fauna, con abundante presencia tanto terrestre como marítima. De hecho, la notable presencia de diferentes aves, ha provocado que Cabrera cuente también con el distintivo ZEPA.
Parque Nacional de Cabañeros
Parque Nacional de Cabañeros
En Castilla La Mancha, entre los municipios de Ciudad Real y Toledo, encontramos estas 39.687 hectáreas naturales. En Cabañeros está una de las mejores muestras de bosque mediterráneo y también de vegetación atlántica, con bosques de ribera y herbazales.
En el ámbito faunístico, soslayar la presencia del águila imperial, actualmente en peligro de extinción. Y todo ello en un paisaje que distingue entre sierras de hasta 1.448 metros de altura y también rañas, con llanuras de 8.000 hectáreas.
Garajonay
Garajonay
Su extensión supera el 10% de la superficie de la isla de La Gomera, ocupando todos los municipios de la misma. De mención especial su epicentro, donde brilla con luz propia el Monumento esencia de la flor. La vegetación o mejor dicho, el Monteverde canario, puebla el 80% de la superficie.
Las elevadas montañas, en funsión con el Océano, regalan a Garajonay un clima muy particular, con niebla y vegetación tupida.
Islas Atlánticas
Islas Atlánticas
El único Parque Nacional que podemos ver en Galicia. Se extiendo a lo largo de cuatro islas: Ons, Cortegada, Sálvora y Cíes. Domina en ellas el bosque de laurel y varios centenares de algas marítimas. Aunque su encanto más superficial se manifiesta en acantilados, playas caribeñas y dunas.
En su fauna encontramos desde gaviotas, hasta delfines.
Monfragüe
Monfragüe
En Cáceres, Extremadura, encontramos esta expresión de la naturaleza que cruza los ríos Tajo y Tiétar. Y lo hace en forma de bosque, dehesas, diferentes roquedos y matorral mediterráneo.
Referente del turismo ornitológico, sobrevuelan su territorio diferentes aves, como el buitre negro o el águila imperial.
Picos de Europa
Picos de Europa
El más longevo de todos, pues se le asignó el distintivo de Parque Nacional en 1918. Y seguramente el más conocido por todos, pues abarca espacios de Castilla y León, Cantabria y Asturias.
Su paisaje está formado por todos los elementos posibles, como son riscos, lagos, bosques y fauna en libertad.
Sierra de Guadarrama
Sierra de Guadarrama
Entre Madrid y Segovia se extiende está alargada cadena montañosa, la última que se ha unido a la lista de Parque Nacional.
Los componentes que completan su belleza son glaciarismos y bosques de coníferas y quercíneas. La fauna que manda en este caso es la de los mamíferos, con presencia de ciervos, gamos, jabalíes, tejones…
Sierra Nevada
Sierra Nevada
El Parque Nacional más grande de nuestro país, pues 86. 210 hectáreas lo contemplan. 2000 especies vegetales y una fauna variable, con destacada mención para la cabra y los insectos, forman su riqueza natural.
Imperdible, o mejor dicho, obligatorio contemplar esta manifestación natural desde el mirador San Nicolás la Alhambra.
Tablas de Daimiel
Tablas de Daimiel
Pasamos del más grande, al parque más pequeño, pues las Tablas de Daimiel ocupa una superficie de 1.928 hectáreas.
Situado en Castilla La Mancha, y más concretamente en Ciudad Real, destaca por ser un humedal peculiar, formado por el desborde de los ríos Guadiana y Cigüela en un terreno sin pendiente, pero con la descarga de aguas subterráneas. Digno de ver.
Teide
Teide
Ante ustedes el Parque Nacional más visitado de nuestro país: 3.052.830 visitantes. Por algo será, y es que el Teide es ese lugar donde fuego y naturaleza no están reñidos. La lava y los conos volcánicos ponen el color, y las especies exóticas, con dominio de invertebrados, la novedad y la exclusividad.
Se encuentra en Tenerife como uno de los mayores reflejos del endemismo vegetal.
Timanfaya
Timanfaya
Y terminamos en las islas, en Canarias y más concretamente, en Lanzarote. El Timanfaya consiguió su distintivo de Parque Nacional por la razón contraria a todos los vistos hasta ahora, pues su belleza no se centra en la abundante vegetación, sino más bien en la aparente ausencia de ella.
Timanfaya expresa la belleza de lo desolado, lo desnudo. Un desierto del verde, para un mar de sensaciones.
Caldera de Taburiente
Caldera de Taburiente
Viajamos ahora a La Palma, en Canarias. La Caldera de Taburiente tiene un claro objetivo, que no es otro que el del rescate o la repoblación genética de especies que están en peligro de extinción, pues el lugar posee numerosos endemismos.
El paisaje está completado por pino canario y diferentes jaras. Manda el anfibio en la fauna, con mención especial a la rana, tanto meridional como de tipo común.
Doñana
Doñana
En Andalucía y comprendiendo las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz, se encuentra Doñana. Su signo de identidad es sin duda sus prolongadas marismas, lo que propicia durante el invierno, la llegada de infinitud de aves acuáticas, dentro del proceso migratorio de las mismas. Sin duda, un espectáculo digno de ver.
Su paisajista es de gran belleza, al estar compuesta de diferentes ecosistemas, con bosques y dunas, llanuras y como hemos señalada, también marismas.
Ordesa y Monte Perdido
Ordesa y Monte Perdido
Aragón reclama nuestra atención con un Parque Nacional que supera las 600.000 visitas al año, siendo el segundo más antiguo con tal distintivo. Destaca en su orografía la presencia del macizo de las Tres Sonores, el más alto de Europa, y que provoca la extensión del Monte Perdido como punto más alto.
Más de 1.400 especies forman su flora, empujada por los valles que se deslizan entre las montañas, hasta formar un gran circo.
Visto todos, ¿con cuál te quedas? ¡Disfruta de la España más natural!
¿SABÍAS QUE…?
… El 41% del territorio canario es espacio protegido lo que ha atraído a numerosos visitantes, otorgando al Teide la categoría de Parque Nacional no sólo más visitado de España, sino también de Europa y el Segundo del Mundo.
