Siempre hemos dicho que visitar Andalucía es apostar por unos días de vacaciones perfectos en los que no sólo se disfruta de su ambiente, y de las típicas fiestas que tanta le fama le dan. También es hacerlo de su cultura, sus pueblos y su naturaleza.
Por eso, una vez más nos desplazamos hasta el sur para mostrarte un poco más a fondo cada uno de sus rincones, y en este caso, los pueblos más bonitos de la provincia de Córdoba, o al menos unos cuantos.
Así que si aún no tienes plan para este verano, o quieres apuntarte una buena ruta para descubrir en esta provincia, ya sabes que los que ahora te vamos a detallar, son una apuesta segura.
¡Vamos a descubrirlos!
Priego de Córdoba
A más de 650 metros de altitud nos encontramos con este pueblo en el el sur de la provincia, que estamos seguros de que te va a proporcionar las mejores vistas y espacios llenos de encanto.
Es conocida como la Joya del Barroco Cordobés por el impresionante legado con el que cuenta su patrimonio, donde esta corriente se ve perfectamente representado en algunos de los principales atractivos de su patrimonio, como es el caso del castillo, la Fuente del Rey, o los puntos de culto religioso materializado en la iglesia de la Aurora, o la Capilla de la Milagrosa entre otros.
Y la guinda, la ponen sus alrededores, llenos de encanto y con mucha vegetación, donde el color verde tiene un gran protagonismo.
Hornachuelos
Situado en plena Sierra Morena sobre dos barrancos, Hornachuelos es un destino idóneo para disfrutar de la naturaleza y el aire puro. Se trata de un pueblo de calles estrechas, popular por su tradición cinegética.
Para acceder al casco histórico, sigue las Cuevas de las Carretas, una impresionante formación rocosa con hendiduras en sus paredes.
Iznájar
Es una verdadera joya, actuando como un balcón hacia el río Genil, que decora sus alrededores, y que tiene junto a él, el embalse.
Esta vez a menos altitud, aunque considerable, es un pueblo ubicado a 522 metros, y dentro de la Subbética Cordobesa que tiene un encanto especial, y en el que vas a poder disfrutar del turismo en vacaciones.
Tiene muchos puntos de interés como es el caso del Castillo, situado en la zona más alta de la población, y donde se aprecia la influencia árabe.
También cuenta con elementos religiosos que tienen gran relevancia, como es el caso de la ermita de Nuestra Señora de la Anitgua y Piedad, o la iglesia en honor a Santiago Apóstol, con visibles características del Renacimiento.
Y en los alrededores, no dudes en hacer turismo activo por lugares como la Sierra de las Ventanas. Un espectacular terreno lleno de encanto.
Baena
Entre olivos y cultivos de cereal se asoma este típico pueblo de viviendas blancas. En su casco histórico destaca la iglesia de Santa María la Mayor, del siglo XIII, con un esbelto campanario que se erige por encima de los tejados.
Luque
Es un pueblo de los más altos de la provincia, ubicándose a más de 620 metros sobre el nivel del mar, que te mostrará la típica forma de edificación en la que la fortaleza siempre se encontraba en un punto defensivo.
Forma parte de la Subbética Cordobesa y en su interior, el patrimonio que te ofrece es espectacular, teniendo un gran valor cultural.
Como sucede en los otros pueblos, las representaciones del patrimonio religioso constituyen la mayor parte de los puntos de atractivo de la zona, siendo en este caso las principales, la iglesia en honor a Nuestra Señora de la Asunción, o las ermitas de Nuestra Señora del Rosario y San Bartolomé.
El castillo al que hacíamos referencia se encuentra en la parte de mayor altitud de este pueblo, y es conocido como el Castillo Hisn Lukk.
La Cueva de la Encantada es otro de los atractivos turísticos de la zona, ubicada en las afueras.
Cabra
Cabra es sinónimo de huertas y casas blancas con flores colgando de sus balcones. La parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, construida sobre una antigua mezquita, es su monumento más representativo.
Pero hay más: la ornamental Fuente del Río, el Castillo de los Condes y el encantador barrio del Cerro.
Almodóvar del Río
Otro de los pueblos con encanto de la provincia de Córdoba, en el que vas a poder disfrutar del patrimonio, la historia y las vistas en una población que forma parte del Valle Medio del Guadalquivir.
A poco más de 100 metros de altitud, te ofrece un emplazamiento perfecto para los amantes de la naturaleza, y la cultura, y además se encuentra muy cerca de la capital, por lo que puedes desplazarte a conocerlo sin perder mucho tiempo.
Entre los puntos que puedes conocer de su patrimonio, destacamos el castillo, que se conserva perfectamente y que es sin duda, una de las fotografías estrella de este pueblo.
Del patrimonio religioso, destacamos la ermita en honor a Nuestra Señora del Rosario y San Sebastián, o la iglesia de la Inmaculada Concepción.
Forma parte del Parque Natural de Hornachuelos, y muy cerca de Sierra Morena, por lo que el plan activo está asegurado.
Montoro
Un meandro caprichoso del Guadalquivir envuelve en sus brazos a esta pintoresca localidad cordobesa con frecuencia apodada el Toledo andaluz.
La iglesia de San Bartolomé destaca entre las casas apiñadas que se alzan sobre el río, ofreciendo una estampa mágica.
Zuheros
Ponemos fin -de momento- a nuestra ruta por algunos pueblos con encanto de Córdoba en esta zona, que forma parte de la Subbética, y que tiene mucho que ofrecer a sus visitantes.
Se encuentra a casi 660 metros sobre el nivel del mar, y en su interior, vas a poder conocer un montón de rincones llenos de encanto, que le aportan mucho valor cultural a la zona.
Si quieres visitar alguno de ellos, los principales son el castillo, situado en la zona más alta, así como la Torre Casa de Muza o la iglesia parroquial.
Sin duda, una de las mejores vistas desde sus puntos más altos.
Bujalance
Con un trazado típico de pueblo de la campiña, Bujalance huele a olivares y rezuma quietud. El Castillo, levantado en el siglo X, y la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción son sus dos tesoros más mimados. Fíjate bien en la torre de este templo, ligeramente inclinada como la de Pisa.
Palma del Río
La población debe su nombre a la abundancia de palmitos en la zona. Se localiza en la confluencia del Guadalquivir y el Genil, los dos ríos andaluces más importantes. Entre sus edificaciones sobresalen las iglesias de Nuestra Señora de la Asunción y de San Sebastián y la encantadora Plaza de Andalucía.
Fuente Obejuna
Esta villa de la comarca del Alto Guadiato, que Lope de Vega inmortalizó en una de sus obras más celebres, siempre estará ligada al dramaturgo; de hecho, su plaza principal lleva su nombre. En ella se alza la iglesia de Nuestra Señora del Castillo, exactamente en el punto más elevado del pueblo.
Espejo
Esta pequeña localidad cordobesa fundada en el siglo XIV es otra de las joyas escondidas de la campiña. Espejo está a buen resguardo bajo el Castillo Ducal, ubicado a una altitud de más de 400 metros. De interés son también el Aljibe y la iglesia de San Bartolomé, de estilo mudéjar.
Montilla
Montilla no se entiende sin sus bodegas y vinos ni sin sus aceites. Las casas blancas del municipio se mezclan con multitud de iglesias, ermitas, palacios y parques. La iglesia de Santiago, la ermita de Belén y el Palacio de los Duques de Medinaceli son algunos de esos lugares que bien merecen una visita.
Almedinilla
Almedinilla es un pequeño municipio de gran importancia arqueológica. Se sitúa a los pies del poblado ibero El Cerro de la Cruz y a un paso de El Ruedo, un yacimiento romano que no te dejará indiferente. Su edificio más característico es la Torre del Reloj, edificada en tiempos de la II República.
Lucena
La que fuera conocida como la Perla del Sefarad es hoy en día una de las ciudades más importantes de la provincia. Lucena cuenta con un rico patrimonio histórico y artístico que se materializa en monumentos como la iglesia de San Mateo, el Palacio de los Condes de Santa Ana o el Castillo del Moral.
Pozoblanco
La capital de la comarca de Los Pedroches combina la tradición con la modernidad. Pese a su incesante crecimiento en los últimos años, no se olvida de su pasado. Su escudo, así, ha sido recreado en una pequeña plaza, donde se halla un pozo blanco con un gallo, ambos bajo la sombra de una encina y junto a una vivienda de arquitectura tradicional.
Posadas
El carácter amable y hospitalario de sus gentes, que se materializó en la construcción de numerosas posadas, es el responsable de que el municipio se denomine así. El río Guadalquivir es el protagonista indiscutible de Posadas, aunque también enclaves como el Arquito, la torre de Guadacabrilla o la iglesia de Santa María de las Flores son aptos para el disfrute.
Belalcázar
En el punto en el que termina Andalucía y comienza Extremadura se sitúa Belalcázar y, con él, su majestuoso castillo. El pequeño casco antiguo de esta villa acoge edificios notables como la iglesia de Santiago el Mayor, que destaca por su fachada austera y de granito.
Puente Genil
La población que conocemos hoy en día nació en la primera mitad del siglo XIX al fusionarse Puente de Don Gonzalo y Miragenil, al otro lado del río. Su principal símbolo es, por ello, el puente sobre el Genil, aunque también encontramos otras edificaciones interesantes, como la Casa Palacio de los Duques de Medinaceli o la iglesia de la Purificación.
Carcabuey
En el corazón del Parque Natural de las Sierras Subbéticas se extiende esta población olivarera de arraigadas tradiciones. Sobre un promontorio se asienta el Castillo de Carcabuey y, a sus pies, la iglesia de la Asunción, en un enclave desde donde también se divisa todo el municipio.
Tranquilos si no habéis encontrado entre esta selección vuestro pueblo favorito. Sabemos que nos dejamos muchos en el tintero, pero es que Córdoba, ¡es mucha Córdoba!