Han permitido que comunidades de todos los tiempos puedan comunicarse salvando todo tipo de accidentes geográficos. Pasarelas que llevan a lugares nuevos, de todos los tipos, colores y con vistas. Hablamos de los puentes.
Lo que antes servía para comunicar, hoy además de hacerlo, sirven como reclamo turístico, como puentes -nunca mejor dicho- tendidos en un viaje hacia el pasado que atrapan a cualquier turista con ganas de contemplar estas impresionantes construcciones.
Los hay romanos, medievales y modernos, y entre todos ellos, hemos encontrado 20 puentes impresionantes que queremos que hoy visites con nosotros.
Sigue leyendo y encontrarás los más relevantes de nuestro país, aquellos que merecen nuestra visita. Una visita que comenzamos ahora mismo.
¿Nos acompañas?
Puente Viejo de Besalú
El puente de Besalú es el símbolo por excelencia de esta coqueta localidad catalana. De origen románico, tiene 135 metros de longitud y está situado sobre el río Fluviá. No hay acceso más mágico al casco histórico de Besalú que a través de este puente.
Puente de San Martín
Al oeste del bello casco histórico de Toledo se alza el puente de San Martín sobre el río Tajo, perfectamente integrado en el paisaje. Data del siglo XIV y ofrece una magnífica panorámica de la ciudad.
Puente Nuevo de Ronda
Pocas palabras pueden describir la sensación de observar el Puente Nuevo enclavado en el Tajo de Ronda por primera vez. Desde finales del siglo XVIII el impresionante puente del municipio malagueño forma parte de este barranco, brindando una estampa casi de vértigo.
Puente romano de Cangas de Onís
El puente romano de piedra sobre el río Sella es una de las imágenes más representativas de Cangas de Onís. Del arco central cuelga una réplica de la Cruz de la Victoria, el símbolo del Principado de Asturias.
Puente de San Juan de Gaztelugatxe
En un lugar tan recóndito como especial de la provincia de Vizcaya, se encuentra San Juan de Gaztelugatxe, un pequeño islote coronado por una ermita. Para acceder hasta ella desde tierra firme se extiende un puente de piedra que, posteriormente, se transforma en un camino serpenteante que llega a la cima.
Puente de Piedra de Zaragoza
En el punto exacto en el que se localiza el puente de piedra, había otro en tiempos de los romanos. Este es del siglo XV y se considera el más antiguo de los que atraviesan el río Ebro. También se conoce con el nombre de Puente de los Leones, por las cuatro estatuas que adornaban el lugar.
Puente de Segovia
Este puente madrileño que cruza el río Manzanares cuenta con el honor de ser el más antiguo de la ciudad. Tras la muerte del primer arquitecto en el siglo XVI, Felipe II encargó a Juan de Herrera continuar con las obras; el mismo que diseñó, de hecho, el Monasterio de El Escorial.
Puente de Monachil
El puente de Monachil es un vertiginoso puente colgante que se eleva sobre el río homónimo. Posee 63 metros de longitud y puede recorrerse para disfrutar de las diferentes tonalidades y formas escarpadas que va adquiriendo esta garganta rocosa.
Puente Romano de Mérida
Con 60 arcos y una longitud de casi 800 metros, el puente romano de Mérida es una obra arquitectónica de espectaculares dimensiones. De hecho, es uno de los puentes más largos de la antigüedad.
Puente de Navaluenga
Uno de los lugares más idílicos de la localidad abulense de Navaluenga es el puente románico que atraviesa el río Alberche. Bajo sus cuatro arcos hay piscinas naturales para disfrutar de un baño con una maravillosa perspectiva de esta obra del siglo XVI.
Puente de Triana
Denominado oficialmente puente de Isabel II, dado que se construyó bajo su reinado, conecta el centro sevillano con el barrio de Triana. A día de hoy es el puente de hierro más antiguo en mejor estado de conservación de España.
Puente romano de Córdoba
Hasta el siglo XX Córdoba no contaba con otro puente más que el puente romano. Fue levantado en la época del emperador Augusto, aunque ha sido remodelado en diversas ocasiones. El atardecer es el mejor momento para contemplar desde la orilla del río el conjunto que forman la Mezquita de Córdoba y el puente romano.
Puente de Rande
El puente de Rande es un gigante de 1.558 metros de longitud sobre la ría de Vigo que comunica las poblaciones de Redondela y Moaña. Hoy en día es uno de los puentes atirantados más largos de España.
Puente de Alcántara
El puente romano de la localidad cacereña de Alcántara es único en el mundo por su magnífico estado de conservación. Cuenta con una longitud de 214 metros, elevándose sobre el río Tajo. Destaca un Arco del Triunfo en el centro del puente, que incluye una inscripción dirigida al emperador Trajano.
Puente romano de Salamanca
El puente romano de Salamanca se construyó en el siglo I sobre el río Tormes y constituye uno de los principales emblemas de la ciudad. En sus orígenes, pertenecía a la Vía de Plata, una de las calzadas romanas que comunicaban Mérida con Astorga.
Puente colgante de Portugalete
Este puente colgante es el puente con transbordador más antiguo del mundo, cuya construcción data del año 1893. Sirve de conexión entre Portugalete y Getxo y, a día de hoy, continúa a pleno rendimiento. Combina estética con funcionalidad, lo que le ha valido la declaración de Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Puente del Diablo
Dice la leyenda que los vecinos de Martorell se encontraban casi incomunicados por las crecidas del río. Un día, el diablo se ofreció a construir un puente a cambio de llevarse con él al primero que lo atravesase. Una astuta anciana sacó un gato negro de su canasto para que cruzara el puente. Desde entonces, Martorell y Castelbisball cuentan con un bello puente que las comunica.
Puente de piedra de Zamora
Este puente del siglo XII construido sobre el río Duero es el más antiguo de los que se conservan en Zamora. Posee 16 arcos de forma apuntada y se considera el icono de la ciudad castellanoleonesa.
Puente de la Vicaria
Sobre el río Segura se alza este puente arco de tablero intermedio que actúa como nexo de unión entre los municipios de Yeste y Letur. Su aspecto singular confiere un paisaje digno de contemplar, sobre todo si el embalse de La Fuensanta está lleno.
Puente de Santa Quitería
El puente de Santa Quiteria se erigió durante el reinado del rey Jaime I. Constituye el puente gótico más sobresaliente de la Comunidad Valenciana dentro de su tipo, al estar formado por arcos en vez de bóvedas.