¿Qué sería de nuestras vacaciones sin un poco de emoción en los recorridos turísticos que hacemos? Pues un viaje al uso.
Si eres de esos a los que les gusta conocer cada uno de los lugares a los que va, pero a fondo, este texto te va a encantar. Eso sí, esperamos que no tengas vértigo ni miedo a las alturas porque te proponemos un plan espectacular.
Hoy, vamos a orientarte sobre una de las actividades que más se demandan últimamente, y que te permiten conocer cada uno de los rincones de nuestra geografía en una experiencia inigualable, y en contacto con la naturaleza.
Las vías ferratas son una opción ideal para todo aquel al que le guste la naturaleza y el deporte. A caballo entre el senderismo y la escalada, es una de las actividades con las que disfrutar de las vistas más espectaculares, y además, se encuentran en multitud de localizaciones.
Si te atreves, te mostramos algunas de las mejores, para que no te quedes con las ganas.
¡Nos vamos!
Vía de Cala del Molí
Dentro de la provincia de Girona, y concretamente en Sant Feliu de Guíxols es donde nos encontramos con este increíble recorrido.
Es de las más conocidas, ya que es la única en la que el camino es por los acantilados que dan al mar, por lo que imagínate las vistas.
2,5 kilómetros que son de fácil acceso, en los que mirar abajo en este caso, te va a garantizar un paisaje único.
Vía de Moclín
En este caso nos situamos en la provincia de Granada, y es quizás, un poco más complicada que la anterior.
Si estás en Andalucía, te recomendamos que la hagas, ya que es una de las pocas que hay en la comunidad.
En todo el camino, vas a poder encontrar diferentes tramos que salvar en distintas modalidades, entre las que se incluyen zonas con peldaños, algunos puentes y algo que nos encanta: una espectacular tirolina de más de 20 metros que pondrá la adrenalina a funcionar.
Vía de Racons
Hasta Andorra nos vamos ahora, donde nos encontramos en la zona de Canillo, una de las vías más complicadas que vas a encontrarte.
Su camino se da en uno de los terrenos más escarpados: el de Roc de Quer, que pondrán tus habilidades físicas a prueba ya que tiene dos acantilados que salvar, además de una gran inclinación.
Si te decantas por esta vía, debes saber que es una zona en la que se han dado muchos casos de desprendimientos, por lo que hay que tener cuidado.
¡A por ello!