Oculto entre la Comarca de Matarraña se descubre este precioso pueblecito medieval. Probablemente uno de los tesoros con más encanto a descubrir en esta zona, y, ¿qué mejor manera de hacerlo que a través del turismo rural?, una forma de vivir experiencias con un punto de vista diferente.
A través de estrechos cañones llegamos a Beceite, lo que nos dice que se sitúa en zona montañosa, en concreto, Los Puertos, que ofrece agrestes paisajes en los que sus habitantes principales son la cabra montesa y distintas especies de rapaces. Te aseguramos que si te atrae la naturaleza más salvaje, disfrutarás de lo lindo.
¿Nunca oíste hablar de este pueblo? No te preocupes, te ponemos en situación ya que su historia se remonta mucho tiempo atrás.
Los primeros vestigios que demuestran su existencia son las pinturas rupestres de la Fenellassa, originarias del siglo 3.500 a.C. Más tarde, los romanos también dejaron un legado a su paso, con dos tramos de calzada como vía de comunicación con otros pueblos. Mientras, de los árabes se desprende su nombre actual. Pero no hasta la Edad Media, cuando Beceite empieza a convertirse en un núcleo importante.
Esto se debe a que en Beceite se desarrolló una floreciente industria papelera, llegando a levantar hasta nueve fábricas y siendo el principal productor de papel a nivel nacional. Como ejemplo de ello, el mismísimo Goya utilizaba este papel para sus famosas obras.
Como parte de su patrimonio actual, estas nueve fábricas aún quedan en pie, construidas en distintas épocas desde el siglo XVIII hasta principios del XX.
Por otra parte, el monumento de obligada visita es El Puente de Piedra, ya que para adentrarse en el pueblo, hay que pasar por él. Su construcción se realizó entre los siglos XV y XVI con la finalidad de que los habitantes de la localidad, en época de riadas, no quedasen incomunicados.
Otro edificio medieval es El Palau, una preciosa construcción de piedra de estilo gótico y renacentista que, en la antigüedad, era residencia del arzobispo de Zaragoza.
Respecto a los monumentos religiosos, hay que destacar dos: la iglesia de San Bartolomé, de estilo barroco y cuya construcción se alargó durante varios siglos, y la Ermita de Santa Ana, situada a las afueras del recinto amurallado de la localidad, en el Barrio del Arrabal.
Y las fiestas, ¿cuándo son? El 5 de febrero se celebra la festividad en honor a Santa Águeda, donde la tradición es degustar del dulce típico: las mamelletes, o también conocidas como tetillas de monja.
Por otro lado, las fiestas patronales se celebran entre los días 23 y 27 de agosto, momento en el que exhibe el Bou de Foc, una estructura metálica en forma de toro a la que se le añade pirotecnia y se va paseando por las calles.
Y ya que hemos nombrado los dulces, ¿te apetece saber algo sobre su gastronomía? Para preparar las comidas más exquisitas, hay que empezar con ingredientes de gran calidad, como el aceite de Matarraña, con su propia Denominación de Origen.
Entre los platos más conocidos en los que no falta ese aceite, tenemos el ternasco asado, así como su delicioso jamón, o las setas, que en esta tierra se dan mucho, e incluso en octubre se organizan jornadas micológicas.
Después de conocer algo más sobre Beceite, ¿te apetece quedarte a dormir y pasar unos días? Pues te animamos a que lo hagas. Y si es en alojamientos rurales, mejor que mejor, ya que así podrás completar una experiencia única con un completo descanso.