Sepúlveda es una de las localizaciones más bonitas que vas a poder encontrar en nuestro país, y cuenta con todas las opciones que necesitas para tener una experiencia turística perfecta.
Es un municipio, y villa, que forma parte de la provincia de Segovia, donde vas a poder descubrir un auténtico museo vivo. Una zona llena de encanto en la que disfrutar de la tranquilidad y de la cultura.
No es que lo digamos nosotros, es que ha sido nombrado Conjunto Histórico Artístico, y además entra a formar parte de la lista de Pueblos Bonitos de España.
Imagínate su belleza.
Forma parte de la comarca de la Villa y Tierra de Sepúlveda, al nordeste de la provincia, de la que le separan 55 kilómetros.
En cuanto a la oferta turística que ofrece la zona, es bastante amplia y variada. Tiene varias vertientes, tanto la natural como la cultural, ofreciendo muchas opciones en cada uno de los casos. Las distinciones que citábamos anteriormente, han creado curiosidad entre los visitantes, que cada vez más se acercan a disfrutar de las buenas vistas.
Supone por tanto, uno de los principales ingresos en la zona, por lo que es uno de sus motores económicos, especialmente en el caso del turismo rural, que actúa como anfitrión de lujo para todo aquel que quiere vivir la esencia de Sepúlveda.
Para disfrutar de las curiosidades que la villa te ofrece, no dejes de perderte por sus calles, y encontrarás lugares mágicos, y muy llamativos de los que disfrutar.
Paseando por una de sus callejuelas, vas a poder encontrar un antiguo cartel que reza “Prohibido hacer aguas mayores y menores en esta calle bajo multa de dos pesetas”. Se encuentra en la calle Talanquera, y se ha conservado para dejar apreciar al turista la esencia de antaño.
Es uno de los muchos detalles que encontrarás entre los muros que forman su entramado, y que crean un ambiente mágico.
Pero en Sepúlveda hay infinidad de lugares que merece la pena visitar, como son los que te vamos a mostrar ahora, que suponen algunos de los más importantes de la villa.
En primer lugar, la Plaza Mayor, empedrada y con un montón de establecimientos donde probar su gastronomía típica, o donde disfrutar de la vida. A uno de los lados de la plaza, nos encontramos con el Castillo de Fernán González, nombrado Bien de Interés Cultural, que es el límite de las murallas de la zona.
Otro de los edificios que tienes que visitar es su antigua cárcel, un lugar ubicado en el centro, que cuenta con mucha historia a sus espaldas. Después, se convirtió en un museo, para dar paso a la sede de la Oficina de Turismo de Sepúlveda.
En cuanto a la arquitectura enfocada a la actividad religiosa, hay varias iglesias que merecen una mención especial, como es el caso de San Pedro, San Salvador, o la de Nuestra Señora de la Asunción.
No podíamos cerrar esta lista sin mencionar el Parque Natural de las Hoces del Duratón; una zona inmensa y llena de naturaleza, que se encuentra protegida y que le aporta al municipio gran importancia a nivel medioambiental.
Para no equivocarnos a la hora de hacer la maleta, con la ropa que te quieras llevar, te vamos a dar algunas claves sobre su clima.
Suele ser un clima suave, en el que disfrutar de las temperaturas frescas durante gran parte del año. Si nos fijamos en los termómetros, enero es el mes más frío del año, llegando con dificultad a los 3ºC, mientras que en julio supera los 29ºC.
Las precipitaciones en la zona se suelen dar en primavera, concretamente en el mes de mayo, mientras que julio sigue siendo el mes más seco.
Si quieres terminar de conocer a fondo Sepúlveda, no puedes irte sin disfrutar de su gastronomía, que te mostrará otra parte de la cultura.
Su recetario se compone de productos naturales, de gran calidad y cocinados con sencillez y sin grandes lujos, aportando así la esencia de la cocina castellana.
El plato por excelencia es el Lechazo Asado, y tanto es así, que se conoce la villa como “La catedral del Lechazo Asado”, cocinado al horno de leña, como antaño.
Para acompañar, las verduras de la huerta de la zona, y el pan de Sepúlveda, cocido también de manera tradicional, pondrán el broche de oro.
En cuanto a la forma de llegar a Sepúlveda, puedes hacerlo en transporte público, o en tu propio coche. Te damos algunas claves para que puedas llegar sin problemas, y optimizando el tiempo en tu viaje.
Si lo haces en coche, deberás tomar la N-1, hasta la salida que indica Castillejo de Mesleón, y de ahí, continuar con las señales hasta llegar a la población.
También podrás hacerlo en autobús, ya que cuenta con una estación y varias líneas regulares.