Salamanca, la provincia de los estudiantes por excelencia, tiene mucho que ofrecer al turismo rural y a la cultura. El combo perfecto para unas vacaciones tanto en verano como en invierno donde si quieres, puedes disfrutar hasta de la piscina.
En verano, los viajeros buscan piscinas en el exterior, centrándose en alquilar una casa rural con piscina privada, o chalets con piscina, que son los preferidos por los grupos que quieren disfrutar de una zona de ocio sin salir del alojamiento.
En invierno, las reinas son las casas rurales con piscina climatizada en Salamanca, donde disfrutar independientemente del tiempo, de esa jornada de baño, jugando o simplemente haciendo unos largos.
Encontrar una casa rural con piscina en Castilla y León, y concretamente en Salamanca es una labor que hay que hacer con el suficiente tiempo, ya que sólo una quinta parte de los alojamientos, disponen de piscina privada.