¡Bienvenidos al sur de la provincia de Salamanca! Te abrimos las puertas de un rincón con mucha personalidad llamado Candelario, donde no puedes olvidarte de dos palabras: regaderas y batipuertas.
Esta población se encuentra en plena Sierra de Béjar y forma parte de lo que se conoce como la Ruta de la Plata. Una de las visitas más recomendables para conocer a fondo la personalidad y la tradición de la provincia de Salamanca. Y además, ¿sabías que forma parte de los Pueblos más Bonitos de España?
Llegando a Candelario para disfrutar de una jornada de turismo rural en la zona, nos sorprende la belleza que tiene esta villa declarada Conjunto Histórico Artístico principalmente por su arquitectura propia y reconocible. Y es aquí cuando necesitaremos las dos palabras clave.
En un paseo por su casco urbano podemos observar dos elementos llamativos. En primer lugar las conocidas como regaderas, que son pequeños canales situados en los extremos de las calles, que llevan el agua desde la parte más alta del pueblo, hasta la zona más baja. Este sistema permitía el regadío de las huertas.
En segundo lugar y si nos fijamos en las fachadas y las viviendas, nos damos cuenta de que existen las famosas y peculiares batipuertas, que son medias puertas de madera que se construían para proteger las viviendas de las nevadas, y también la entrada de animales.
Algo que también es muy característico de Candelario es la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, una construcción en la que se puede apreciar la mezcla de diferentes estilos arquitectónicos. También como construcción religiosa nos encontramos con la ermita del Cristo del Refugio, también conocida como la ermita del Humilladero, en la que se encuentran algunos restos de una antigua iglesia de Béjar.
Las fuentes también son elementos característicos en Candelario, ya que es muy frecuente que, durante un paseo por la población, te topes con varias de ellas. Las tres más importantes, cada una de ellas en lo que fue una de las entradas del pueblo, son la de las ánimas, de los Puentes y la de Lapachares.
Además, sus calles que son estrellas, con numerosas cuestas y un entramado empedrado son testigos de una de las fiestas típicas en Candelario. Cada año se celebra la Boda Típica, una de las celebraciones más características y peculiares en la que se representan los antiguos enlaces. Los bailes y trajes típicos son una constante durante esta celebración en la que participan los habitantes del pueblo.
Como curiosidad, cabe destacar que Candelario fue el escenario elegido para diversos rodajes de cine y televisión, como es el caso de la película El pequeño Ruiseñor, que tenía como protagonista a Joselito.
Para finalizar tu visita, nada como hacerlo degustando alguno de sus platos típicos en los que predomina la chacinería, una actividad tradicional. Degusta sus ricos embutidos que son el resultado de la matanza del cerdo.
¡Disfruta de Candelario!