La Región de Murcia tiene un montón de sorpresas que hay que conocer, y que tienes que visitar. Sorpresas como la que te ofrece el municipio de Caravaca de la Cruz, un espacio que también tiene frontera con Granada y que cuenta con mucha historia que es resultado del paso de diferentes pueblos.
Son más de 600 los metros de altura que tiene, y debido a su perfil religioso se califica como Ciudad Santa, título que le otorgó Juan Pablo II o Ciudad de la Cruz. Es precisamente su localización lo que le hace tener un paisaje único que bien merece una visita.
¿Quieres saber cuáles son los lugares que no puedes perderte en Caravaca de la Cruz? Preparamos una escapada por los rincones con más encanto de esta ciudad.
En primer lugar destacamos la parte natural, con las Fuentes del Marqués a la cabeza. Un recorrido a las afueras en el que se encuentran numerosos nacimientos de agua. Dentro de este paraje además puedes encontrar un pequeño castillo medieval llamado el Torreón de los Templarios.
Si quieres recorrer el terreno tanto a pie como en bici o a caballo, la Vía Verde del Noroeste te lleva por el antiguo camino que unía Murcia con este municipio. En todo el trayecto te van a acompañar las vistas de la Sierra de Mojantes, con una zona declarada ZEPA, y la Sierra del Gavilán, en el que se aprecia a la perfección el Pico de la Peña Rubia bajo el que encontrar vastos robledales en los que perderte.
Si hablamos del patrimonio monumental, hay que destacar el lugar símbolo de Caravaca, que es la Basílica de la Vera Cruz, que data del siglo XVII y en el que se levanta la famosa Cruz de Caravaca. Aquí, la influencia islámica está muy presente en el Real Alcázar. En este mismo espacio se encuentra su propio museo.
Otras construcciones religiosas son las iglesias de El Salvador y la de la Soledad, así como varios conventos. El de las Madres Carmelitas Descalzas y el de los Padres Carmelitas de Caravaca de la Cruz son los más importantes.
Fuera del culto religioso también hay atractivos en el municipio. Entre ellos se encuentra el Ayuntamiento, la Plaza de Toros y el Castillo, junto al barrio medieval que es una de las visitas que no puedes perderte, en el aún hoy se aprecian restos de la muralla.
Pero como hemos dicho, ha sido una tierra que ha servido de asentamiento a diferentes pueblos a lo largo de la historia, y su prueba la encontramos en los diferentes yacimientos encontrados en la ciudad, como es el caso del Camino del Molino, siendo considerado el enterramiento más amplio de la Península. Muy cerca se pueden visitar las casas circulares del poblado Molinos de Papel.
Pero en el Estrecho de la Encarnación puedes darte un paseo por la Prehistoria sin moverte de este yacimiento. Hay restos del Paleolítico, de la Edad de Bronce y de las épocas romana y musulmana. Una completa representación de gran importancia.
Si viajas en mayo, las Fiestas de la Santísima y Vera Cruz de Caravaca son las más típicas, en las que se dan cita los festejos de Caballos del Vino y Moros y Cristianos. Este conjunto de actividades que son tan típicas del folclore de Caravaca, han sido declaradas de Interés Turístico Internacional.
La Fiesta de las Cuadrillas, y la siempre intensamente vivida Semana Santa son dos de las que tampoco puedes perderte, acompañadas por supuesto de una gastronomía llena de contrastes con platos como la tartera, el empedrado o la olla de muerte marrana, que lejos de lo que pueda parecer por su nombre, está riquísima.
¡Que disfrutes de tu viaje por Caracava de la Cruz!