Molino del Rìo

Esta casa rural se encuentra en Torre de la Cárcel, Teruel y su ubicación cercana al rio será la musica relajante de tus vacaciones.

Tiene una capacidad para 11 personas que podrán disfrutar de 5 cómodas habitaciones, que cuentan con las siguientes características:

Cuatro de las habitaciones cuentan con una cama doble, techo abuhardillado, 2 mesas de noche con lámparas, suelo de baldosa y ropa de cama para mayor comodidad. Estas habitaciones cuentan con rústicas pero encantadoras ventanas de madera con vistas a la montaña y jardín. 

La quinta habitación cuenta con 2 camas individuales, una mesa de noche central, techo abuhardillado, suelo de baldosa y ventana con vista a la montaña.

Esta casa cuenta con 2 baños equipados con ducha, lavamanos, secador de pelo, toallas y artículos de aseo.

Entre las zonas comunes de la casa destaca la sala de estar con paredes de piedra, suelo de baldosa, techo de madera y equipada con 2 cómodos sofás de 2 plazas y una butaca individual. Cuenta con televisión de pantalla plana, una mesa de comedor para 4 comensales y una fantástica chimenea para pasar una relajada tarde frente a las brasas.

La cocina de tipo americana y con un fabuloso techo con vigas de madera vistas, esta provista de nevera, microondas, fogones y utensilios de cocina además de una pequeña mesa de comedor para 4 comensales.

Como toque de entretenimiento esta casa cuenta con una completa librería en la que podrás encontrar increíbles historias para un momento de lectura nocturno.

En el exterior de la casa podrás disfrutar de un amplio jardín y una terraza en la que la barbacoa se llevará el gran protagonismo de la comida familiar. 

Esta casa y sus alrededores brindan la posibilidad de realizar un sin número de actividades que mejorar tu experiencia durante tu estancia.

La casa dispone de bicicletas que podrás utilizar para recorrer los hermosos paisajes que la rodean, así como practicar senderismo por las diferentes rutas naturales desde la casa.

Si buscas conocer más de la provincia puedes visitar el peculiar pueblo de Albarracín. Este pueblo es característico por sus calles empedradas y colores rojizos de las fachadas debido a la roca sedimentaria con la que están hechas. Una vez aquí podrás conocer la catedral de San Salvador, las murallas de Albarracín o los curiosos balcones colgantes de las casas de Cuenca.