Mas del Blat

Esta casa rural era una antigua Masía del siglo XVII ubicada en Calonge, que ha sido restaurada para el turismo en la Costa Brava. En todo momento se ha respetado la estructura original, de manera que el interior aún alberga las vigas de madera y las bóvedas de las paredes en piedra.

Su tamaño la hace perfecta para los grupos grandes y las familias numerosas, ya que tiene capacidad para 10 personas en total. Los 220 m2 que la componen se reparten en dos plantas, además de la enorme parcela de césped que la rodea. Enfrente están el bosque y las montañas, una panorámica visible desde la vivienda.

• Las habitaciones son 4: dos de ellas tienen 2 camas individuales, una tiene una cama king size y la última otra cama king size y un sofá- cama. Todas ellas se orientan hacia las ventanas que dan al jardín, para despertaros cada mañana entre la naturaleza.

• Se inlcuyen las sábanas y las toallas se dejarán sobre la colcha para los cuartos de baño, estancias que comparten las habitaciones, algunas comunicadas entre sí. El menaje de hogar favorece además el bienestar de nuestros huéspedes, pues las estanterías de alrededor se llenan de libros y las lámparas se adaptan a la lectura.

• Por tanto, los 2 baños pueden aparecer en suite y se han equipado con mobiliario sofisticado que invita a descansar bajo la ducha o a tener un momento más tranquilo en la bañera. Su mejor cualidad es la buena iluminación natural que les llega desde el exterior.

• Para estos aseos hay productos variados que van desde jabones hasta un secador de pelo que viene muy bien al salir del agua, junto a los sanitarios también dejaremos provisiones de papel higiénico.

• Ya en la planta baja, el salón tiene acceso directo al patio y este hecho también alumbra la gran sala. Como hemos dicho, la antigua casas sale a relucir en la arquitectura y se complementa con la chimenea de leña que hay antes de salir al exterior. El calor del fuego se contrarresta con los ventiladores.

• Mientras, los sofás se agrupan en torno a una mesilla de madera con información turística y junto a la pared hay un banco con cojines para sentarse. Más adelante bajo el arco de piedra está la cocina, de diseño rústico y con un comedor para compartir el menú casero. No le falta detalle, cafetera incluida y una buena lista de electrodomésticos como el horno y vitrocerámica para los guisos.

• Además de las instalaciones del jardín, aquí dentro también hay un espacio dedicado a la televisión, donde podréis poner Netflix. La sala de juegos tiene una colección de diversión, con juegos de mesa, música para bailar y hasta mesa de ping pong.

En el exterior os esperan:

• Un porche que es la conexión con la zona de césped que envuelve a este hogar. Tiene un largo comedor que se extiende en la terraza para disfrutar aquí de las tardes de verano con una parrillada en la barbacoa. También hay sillones que se agrupan formando un chill out para estrechar lazos mientras véis la puesta de sol.

• Aunque la gran protagonista es la piscina, un vaso al aire libre que se rodea de hamacas y sombrillas.

• Un pequeño rincón con un par de sillas que rodean una mesilla se ha dedicado para estar a solas frente al bosque, quizá tomar una copa de vino y disfrutar de la tranquilidad.

• Aparcamiento privado para dejar vuestro vehículo a buen recaudo.

Esta villa se localiza en el municipio de Colonge, en Girona, en la zona destinada al turismo costero. Su cercanía al mar hace que se pueda llegar a las playas de la Costa Brava en cinco minutos, siendo una de las más cercanas la Platja Torre Valentina. Haciendo honor a la parte medieval del pueblo catalán, ésta se caracteriza por su torre de vigía y la arena es blanca frente a las aguas tranquilas del Mediterráneo.

Otro de los arenales que se pueden encontrar aquí es la Platja de Sant Antoni que, gracias a su poca profundidad y servicios, se vuelve realmente atractiva para familias que tengan hijos. A su lado se extiende el paseo marítimo, un largo camino para disfrutar de la brisa marina.

Para los amantes del senderismo, la vall dels Molins es una ruta que os permitirá recorrer los bosques a través del denominado como 'Sendero del agua', que os llevará entre la maleza junto al río.

En cuanto a espacios verdes que contrastan con el suave azul de la costa, el Parc del Convent dels Agustins es uno de los lugares más interesantes para visitar. Este punto en concreto destila historia en cada uno de los elementos recuperados de un antiguo monasterio, restos que permanecen en pie hoy en día gracias a su conservación.