Lar de Vilariño

Nuestra casa rural se encuentra a las afueras de Poio, una localidad pontevedresa muy cerca de la playa.

Consiste en un gran edificio, una construcción que data del siglo XVIII. Con tanta historia a sus espaldas, la restauración se ha llevado a cabo respetando los materiales originales y la personalidad característica de la casa. Su fachada presenta grandes rocas formando los muros, salpicada con ventanas de distintos tamaños y balcones.

Tiene diferentes alturas, debido a que el terreno donde se situa tiene algo de pendiente. En total, la capacidad es de 12 personas, incluyendo 2 camas adicionales.

Tiene 5 dormitorios, todos con camas de matrimonio, pero cada uno con una decoración diferente, cohesionada por elementos comunes, como la madera. Destacan los cabeceros, con distintos dibujos y en distintos materiales. Por ejemplo, uno de ellos tiene piel, mientras que otro está pintado de blanco o tiene un dosel con románticas cortinas cayendo. En algunas de sus paredes aún se conserva la mampostería, combinándola con colores lisos y en tonos claros.

En cada habitación hay un baño interior, propio para cada una.

El salón y el comedor están ubicados en una estancia a 2 alturas, para separar los ambientes:

• Por un lado está la sala de estar, con sofás de 2 plazas beis y muebles de madera oscura, como una vitrina.
• En el otro extremo está el comedor, equipado con mesas y sillas tapizadas con piel de tonos oscuros, a juego con el resto de la sala.

También existe una cocina, donde encontrarás todo lo necesario, incluso lavavajillas para que tus vacaciones sean lo más cómodas que se pueda.

En el exterior, tenemos un recinto genial, situado en un alto, con piscina y hamacas, desde donde verás todo el paisaje. Además, también podrás usar nuestra barbacoa.

Al estar tan cerca del mar, hay un montón de cosas que puedes realizar en torno a él.

Por ejemplo, puedes desplazarte en barco hasta la isla de Ons, una de las que forman el archipiélago declarado Parque Natural.

Combarro es una parroquia cercana, conocida por sus bonitas playas y su patrimonio histórico, plagado de hórreos antiguos y cruceros típicos gallegos.

En el propio Poio puedes ver también otros lugares, como el monasterio de Poio. Es una genial representación del románico, pero, no solo es atractivo por la arquitectura, sino que también posee una gran biblioteca en su interior.

Está claro que las Rías Baixas son un elemento principal de nuestro alojamiento, debido a la cercanía. Cada una de ellas son dignas de visitar, al igual que las playas que forman en sus desembocaduras.