En lo más profundo del Valle Escondido de los Pirineos se encuentra Benasque. Este pueblo de la comarca de la Ribagorza (Huesca) es el destino rural perfecto, oculto entre los picos que separan España y Francia.
¿Qué puedes ver allí? Podemos empezar dando un paseo por la avenida principal del pueblo, la Calle Mayor, que nos llevará al Palacio de los Condes de Ribagorza. Es un edificio renacentista que ha tenido diferentes funciones a lo largo de la historia, pero a día de hoy es el Centro Cultural de Benasque. Si seguimos por la calle llegaremos al centro del pueblo, la plaza del Ayuntamiento, donde se encuentra la iglesia de Santa María la Mayor, de estilo románico del siglo XI.
Vamos, vamos, que hay que continuar. Tendremos que caminar algo más para encontrar el Torreón de la Casa Juste, que con sus 18 metros de altura se ve casi desde cualquier punto de Benasque. Finalmente, haremos nuestra última parada en el Centro de Visitantes, dedicado a informar sobre el Parque Natural de Posets-Maladeta a través de exposiciones audiovisuales.
¿Ya estás preparado? Porque ahora toca salir del pueblo. Y como ahora lo sabes todo sobre el próximo destino, puedes explorar libremente el parque natural de Posets-Maladeta.
Es un gran espacio protegido en los Pirineos, en el que son frecuentes las nevadas. Aun así, es perfecto para practicar deportes como esquí o montañismo, si te atreves a coronar el Pico Aneto y sus 2.812 metros de altura.
Otro plan más tranquilo es el de hacer algo de senderismo. La ruta del Forau de Aigualluts lleva directo a una cascada con el mismo nombre, y además es perfecta para hacerla con niños.
¿Qué más puedes hacer? No está de más visitar los pueblos vecinos de Anciles y Cerler. Este último es especialmente conocido por sus pistas de esquí y ser el pueblo más alto de los Pirineos aragoneses.
Y si te entra frío, en cualquiera de las tascas del lugar estarán encantados de servirte un plato caliente. Las especialidades de la zona son el jabalí estofado con salsa de… ¡chocolate! Has leído bien, salsa de chocolate. Otro plato típico es la olla benasquesa. Para explicarlo… Digamos que si te gusta el cocido, te gustará este plato de cuchara, ya que también lleva legumbres y carnes varias.
Si te gusta el folclore rural, debes quedarte a disfrutar de las fiestas patronales de San Marcial. Cada 30 de junio, las calles se llenan de colores, música y bailes durante dos días: el primero sucede el Ball dels Omes, mientras que el segundo llega el turno de las mujeres que interpretan el Ball de les Donnes.
Sabemos que todo esto suena a cansancio, pero será un cansancio gratificante del que te podrás recuperar en cualquiera de los hoteles y hostales que ofrece el pueblo.
Trata de recargar todas las energías para no dejar ningún rincón de Benasque sin explorar en estas vacaciones de turismo rural.