Casa Vella del Pantà

Nuestra casa rural se localiza a orillas del pantano de Riudecanyes en la provincia de Tarragona.

Esta casa surge del sueño de una familia vivir la vida ecológica al lado de un pantano.

Se trata de la antigua casa del responsable del pantano, que ha sido renovada y que casi está terminada.

A día de hoy acoge hasta 22 huéspedes, que podrán conocer estas modernas instalaciones tan respetuosas con el medio ambiente y disfrutar del acceso gratuito a internet.

Contamos con 8 dormitorios, se combinan habitaciones de pareja con camas de matrimonio, habitaciones dobles y habitaciones cuádruples. Todas las habitaciones tienen baño propio con bañera que está integrado de madera innovadora en la propia habitación, excepto la zona del sanitario que está a parte. Estas habitaciones cuentan con grandes ventanales y pintura y decoración en tonos pálidos con elementos naturales, como troncos de madera o palés decorativos.

Un gran salón con mirador. Se trata de un espacio abierto con sofás y chaise longue, una mesita auxiliar.

A continución, una mesa de comedor para disfrutar de estupendas comidas que se comunica con la zona de cocina, de color rojo combinada con electrodomésticos en acero inoxidable y todo lujo de utensilios que harán de su momento de cocinar una diversión sin precedentes.

Lo mejor de este espacio es el proyector para ver películas.

En el exterior hay un precioso patio, cuya decoración está muy cuidada y cuenta con elementos de relax creando una zona chillout y elementos de terraza para disfrutar de comidas al aire libre y de su barbacoa exterior. Además cuenta con un jacuzzi pequeño que se calienta a 35 grados unas horas al dia entre abril y finales de octubre. En temporada alta también se puede gozar de una piscina. 

Nuestra localización, muy cerca del pantano de la población que es Riudecanyes, formando parte de la provincia de Tarragona, ofrece como puedes comprobar, un entorno único que tiene un encanto especial del que podrás disfrutar, descubriendo cada rincón de sus calles y recorriendo los espacios naturales.

De estos últimos destaca el anteriormente citado pantano, que es apto para el baño y que será, seguro, un lugar en el que refrescarse en la época de calor.

De las construcciones que merecen mención especial, destaca el Castell d’Escornalbou que fue convertido en casa señorial a mediados del siglo XIX, le rodean misteriosas leyendas.

La Iglesia de San Mateu del siglo XVI con sus preciosas bóvedas de colores y etampados.