Casa Rural Fonda Molinero

Nuestra casa rural se encuentra en Atienza, un pueblo de Guadalajara.

Se trata de una casa muy antigua, con mucha historia a sus espaldas, en pie desde 1700. Al contrario que en otros casos, donde son construcciones rehabilitadas y convertidas en alojamiento rural, nuestra casa lleva hospedando turistas desde 1915. Ya hace más de 100 años que esta vivienda recibe gente de todas partes, un sitio característico desde antaño.

Además, los propietarios siguen siendo la misma familia, generación tras generación, por lo que son unos auténticos profesionales del turismo rural. Allí te sentirás como en casa, pero con el encanto rústico y el sabor antiguo de la fonda.

Consiste en una construcción al estilo de antes, con paredes muy gruesas que aislan perfectamente la casa. Otro elemento característico son sus fuertes vigas de madera, conservadas en la medida de lo posible.

El alojamiento tiene una capacidad máxima para 15 personas, contando con las camas adicionales, y distribuidas en 5 habitaciones.

Los huéspedes también podrán usar el resto de la casa, además de los dormitorios.

Hay una sala de estar, con butacas y sillones y un amplio ventanal. El blanco de las paredes contrasta con los sofás de colores y con los detalles en distintos tonos de madera. En esta habitación puedes utilizar la televisión o el DVD, pero también tenemos una cadena de música y hasta juegos de mesa. En definitiva, no tendrás tiempo para aburrirte ni dentro ni fuera de nuestra casa.

Otra estancia muy especial es la biblioteca, con varias estanterías y sitios para sentarse. Constituye un lugar perfecto para desconectar de la rutina y disfrutar de un buen libro. Destaca la cantidad de luz que entra por las ventanas. Además, aquí ponemos a disposición de nuestros usuarios información sobre la comarca y los lugares que pueden visitar.

Tenemos una cocina que pueden usar nuestros huéspedes, con todo lo necesario.

La casa también cuenta con un restaurante, conocido por la calidad de sus asados, muy típicos en la zona.

Ponemos a su disposición servicio de internet, a través de WiFi.

Lo primero de todo, es fundamental visitar y recorrer Atienza, el pueblo donde se encuentra nuestra casa. Se trata de una localidad muy antigua, denominada anteriormente "Tithya": se sabe que fue poblada por celtíberos, de quienes se han encontrado restos en la necrópolis de Cerropozo.

Sin embargo, lo más característico de Atienza es su castillo y las murallas que lo acompañan. Se encuentra en una peña alta, en la cima de un cerro, debido a su finalidad defensiva. Aún se conservan restos de las murallas, que tenía numerosas puertas y arcos, como el Arco de la Guerra, que todavía se puede apreciar.

Toda la comarca y los alrededores merecen la pena, cada uno por unos motivos:

• Sigüenza, la capital de la Diócesis de Guadalajara y con la preciosa catedral de Santa María.
• Cañón del río Dulce, unos impresionantes barrancos con buenísimas vistas.
• Hayedo de la Tejera Negra, un precioso bosque de hayas que forma idílicos paisajes dependiendo de la estación del año.
• Pueblos de la arquitectura negra, una ruta de municipios formados por construcciones mayoritariamente de pizarra, que constituyen unos conjuntos muy peculiares.