Casa del Pinar

Nuestro alojamiento se encuentra en plena naturaleza, a las afueras de la abulense localidad de Navarredonda de Gredos, un precioso enclave para disfrutar de los paisajes de la Sierra de Gredos.

Se trata de una rústica casa rural, levantada en paredes de piedra y con un interior con la madera como protagonista, ofreciendo un agradable y cálido ambiente para desconectar.

A la entrada de la casa, encontramos una zona de terraza, ideal para disfrutar haciendo buen tiempo mientras escucháis el canto de los pájaros de fondo, aunque en días lluviosos, también tendréis la oportunidad de contemplar las vistas, ya que hay otra terraza cubierta de grandes ventanales.

La casa tiene un espacio disponible para cinco personas, y se distribuye en dos plantas, siendo la superior una zona abuhardillada.

En la planta baja encontraremos un espacio amplio y diáfano, en el que se reparten, por un lado, el ambiente de salón, con un cómodo sofá y televisión plana, y con dos camas individuales que también pueden tener uso de sofá.

Otro ambiente es el comedor, con una mesa con vistas al exterior, que comunica con la cocina, de estilo rústico, pero completamente equipada.

La última estancia que encontramos en esta planta es un baño completo con bañera.

En el centro de la planta baja, es donde se sitúa el acceso a la planta superior mediante unas escaleras, llegando hasta una amplia habitación con tres camas individuales.

A la habitación le acompaña, además, un segundo baño, que cuenta con un espacioso plato de ducha.


Al estar la casa situada en el bosque, no se permite la realización de barbacoas o cualquier tipo de actividad que pueda provocar un incendio.

Navarredonda de Gredos, como podrás imaginar por su nombre, se encuentra en la Sierra de Gredos, en el sur de la provincia de Ávila.

Su casco urbano no es muy extenso, aunque alberga algún que otro monumento como la iglesia, en honor a Nuestra Señora de la Asunción.

Pero si hay algo que tiene Navarredonda de Gredos, es una naturaleza desbordante. Podrás hacer excursiones hasta La Laguna Grande y el Circo de Gredos, por ejemplo, o una caminata hasta el Pozo de las Paredes, con la recompensa de, al llegar, poder bañarte en sus piscinas naturales.