Abrimos las puertas de la Costa Blanca, un rincón en el que disfrutar de la cultura y la naturaleza desde el municipio de Jávea, que es uno de los mejores destinos para pasar las vacaciones en la provincia de Alicante.
Jávea, o Xàbia para los locales, es un rincón lleno de magia protegido por el pico más alto que es el Montgó y que resguarda a esta población de los vientos, dándole un clima suave que hace las delicias de los turistas. ¿Sabías que en los años 90 fue considerado como el mejor clima del mundo? Te puedes hacer una idea de lo a gusto que estarás en el municipio alicantino.
Sin duda es un reclamo para los que buscan naturaleza, que encuentran en esta joya de la comarca de la Marina Alta, un auténtico paraíso de verdes y agua. En cuanto a sus playas, podemos destacar algunas como Cala Ambolo, que te transportará a cualquier isla tropical. No es la playa más accesible, por lo que es perfecta si buscas algo de tranquilidad o incluso emoción, haciendo submarinismo. Y cuando acabes de bañarte, no dudes en subir a su mirador.
Otras playas con encanto son la playa del Arenal, ésta mucho más concurrida por la tranquilidad y poca profundidad de sus aguas, lo que le hace ser una de las preferidas por las familias. Y prepara tu cámara si decides pasar el día en Cala Granadella, ya que sus vistas, entre acantilados, son espectaculares.
Pero Jávea ofrece mucho más que playas, y es que cuenta con la Cova Tallada, uno de los imperdibles en tu viaje. Se trata de una enorme cueva de piedra junto al Cabo de San Antonio a la que podrás llegar incluso en kayak. Aunque si eres más de poner los pies en la tierra, te espera una buena ruta por el Montgó y si consigues alcanzar la cima, podrás ver incluso la isla de Ibiza. Después, llegar hasta el Faro del Cabo de San Antonio es muy sencillo.
Pero para conocer Jávea a fondo tienes que visitar su precioso casco antiguo, con calles empedradas que llegan hasta monumentos y lugares históricos, o incluso hasta el Mercado de Abastos, otra de las visitas.
No te puedes perder la Plaza de la Iglesia, en la que se levanta la iglesia gótica que un día actuó de defensa y es en honor a San Bartolomé. Muy cerca también está el Ayuntamiento, otro de los centros neurálgicos para visitar.
Por la noche un paseo por el Puerto, o disfrutar de un paseo por la parte más turística que comprende el espacio llamado Arenal de Jávea, es un plan ideal.
Si no has vivido nunca las fiestas de este municipio ¡te estás perdiendo algo único! Y es que son famosas las de moros y cristianos, donde la música y el color están en cada calle. No es la única fiesta, ya que las de San Sebastián y Jesús Nazareno también están marcadas a fuego en los calendarios javienses.
Si hay una tradición por excelencia esa es la de La Nit dels Focs, que se celebra en junio, en la noche de San Juan.
Por último, te recomendamos que aproveches que te encuentras en esta zona para degustar sus platos típicos. Unas recetas con dos pilares básicos: el arroz y el pescado que crean delicias como las paellas. ¡Puro sabor de Jávea!