Disfrutar de la naturaleza es una de las cosas que solemos buscar cuando nos vamos a algún destino nuevo un fin de semana.
Conocer el entorno y aprovechar para hacerse un buen selfie del que presumir a la vuelta, te parecerá un plan sencillo y «cómodo» pero, ¿qué pasaría si te mostrásemos un lugar para hacer senderismo con muchas opciones para el turismo? Pues que seguramente querrías repetir.
Hoy te queremos acercar un poco más a uno de los paisajes que está en auge en Castilla y León, y concretamente en el municipio de La Adrada.
Si quieres investigar un poco más a fondo, no te pierdas lo que vamos a enseñarte ahora, y prepárate para conocer un poquito más a fondo esta zona de Ávila a través de sus espectaculares puentes.
¿Qué tipo de ruta es?
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Pues sin duda una de las opciones más divertidas para hacer senderismo y conocer la zona, disfrutando de las mejores vistas.
La ruta en conjunto es algo más larga de 15 kilómetros, donde vais a poder salvar un desnivel de más de 160 metros, encontrando el punto más alto en casi los 600 metros.
Es una de esas rutas perfectas para hacer en familia, ya que la dificultad es baja, y os permitirá disfrutar del camino sin problemas. Eso sí, es bastante larga por lo que se recomienda llevar algo de agua y comida, para recargar pilas.
¿Qué me voy a encontrar?
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Pues es una sucesión de puentes que se encuentran rodeados de la naturaleza más pura de la zona, y que te van a dejar con la boca abierta.
El primer puente lo encontramos tras pasar lo que se conoce como Las Dehesillas, y tras una ligera bajada llegamos al primero de los reclamos: el Puente Mosquea.
Hasta aquí solo habrás andado 2 kilómetros y medio, y aunque el esfuerzo ha sido notable, las vistas merecen la pena.
El segundo puente lo encontramos muy cerquita, a poco menos de medio kilómetro, y en un escenario como pocos has visto. Es una maravilla todo lo que rodea al Puente Chico, un lugar que parece sacado de los cuentos.
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El tercer parón que hacemos es a un poco más de los 6 kilómetros de la ruta, donde nos encontramos con Puente Mocha.
Este puente de piedra tiene bajo el mismo las aguas del río y en los alrededores, la magia de los espacios verdes en los que los prados y los árboles son protagonistas indiscutibles.
