El Alto Ampurdán, o Alt Empordá en catalán, es una de las comarcas catalanas en las que perderse es encontrar. Encontrar historia, paisajes y en definitiva, un perfecto lugar en el que hacer turismo enclavado en la provincia de Girona.
Son muchas las personalidades que han paseado por sus calles, que se han inspirado en sus paisajes, y que nos han dejado lugares con un sello personal impreso.
Hoy queremos hacer un recorrido por los pueblos con más encanto de esta zona protegida por la imponente presencia de los Pirineos Orientales y la calma del Mediterráneo.
Prepara lápiz y papel y échale un ojo a estos alojamientos para visitarnos, que comenzamos nuestra aventura.
CADAQUÉS
Del latín Cap d’Aqués, significa de Cabo de Rocas. Se sitúa en la parte más oriental de Girona, tradicionalmente pueblo pesquero. Durante años, se quedó aislado y desarrolló su propia lengua tomando su raíz del catalán.
Personalidades como Marcel Duchamp, Joan Miró o Pablo Picasso tuvieron aquí durante años sus residencias vacacionales. Mención especial a Salvador Dalí, quien pasó gran parte de su vida en esta zona y del que encontrarás la Casa Museo, ubicada en la Bahía de Portlligat.
No te puedes ir de Cadaqués sin ver iglesia parroquial de Santa María, ubicada en el punto con mayor altitud de su casco antiguo, o el Parque Natural de Cabo de Creus, sin duda, la más llamativa. Posee un impresionante faro que hace las funciones de mirador de excepción desde el que puedes ver la belleza de su extensión, combinando mar y tierra y creando un hábitat perfecto para especies autóctonas que están en peligro de extinción.
FIGUERES
Tierra situada al norte y que ha dado origen a algunas personalidades del mundo actual como la cantante Mónica Naranjo o el deportista Maverik Viñales. Sin duda, el más ilustre y mundial de todos es Salvador Dalí, del que hoy podemos saber algo más gracias al Teatro Museo que él mismo decoró, donde se rebosa su personalidad en cada uno de los rincones. Anexo a este edificio se alza imponente la Torre Galatea, que fue su residencia durante los últimos años de vida del artista.
Desplazarte hasta el Castillo de San Fernando, construido en 1743 por orden del rey Fernando VI, te permitirá desmembrar su historia y conocer uno de los Bienes de Interés Cultural de la zona.
Por último, entre el Museo del Juguete y el del Ampurdán, terminarás de descubrir la forma de vida y de ocio de los habitantes y su evolución con el tiempo.
ROSES
Ubicada en un lugar privilegiado de la costa que lleva su nombre, esta población es un imán para el turismo, y no es para menos.
Es quizás uno de los lugares más “movidos” a los que te puedes desplazar de la zona. Su zona de playas casi vírgenes y la cantidad de calas que se reparten en todo su territorio, crean espacios dignos de descanso de los reyes.
El ocio está asegurado. Cuenta con un puerto marítimo, que conserva esa esencia original, y otro deportivo, para satisfacer tu parte más enérgica. El verano es su temporada estrella.
Te recomendamos que visites la Ciudadela de Roses, que encierra la antigua estructura de la villa según los cánones del medievo y de la que aún hoy se conservan vestigios.
Para finalizar en lo más alto, y nunca mejor dicho, el mirador de Santa Rosa de Puig Rom, con más de 200 metros de altitud, te ofrecerá la mejor panorámica que puedas tener de las Islas Medas. Todo un lujo.
PERALADA
Las primeras referencias que tenemos de este pueblo datan del 500 a.C, cuando los íberos formaron la primera estructura en la que se desarrollaba el día a día.
Posteriormente, y ya centrados en la Edad Media, se levantaron numerosas construcciones de las que aún hoy se conservan detalles.
De 1877 es el Castillo de Peralada, residencia habitual de los condes que hoy puede visitarse a través de su museo. Se engloba dentro del territorio del Convento del Carmen, en forma de superestructura histórica.
No puedes perdértelo y por eso te recomendamos que descanses en cualquiera de estos alojamientos.
EMPURIABRAVA
Tiene uno de los entramados más reconocibles de toda la costa.
Se estructura en más de 20 kilómetros de canales aptos para la navegación, lo que hace que su puerto sea uno de los más amplios y a la vez, una zona residencial, en forma de pueblo pescador.
Esta visión donde las casas se separan únicamente por agua, sobre la que flotan las embarcaciones y junto con el telón de fondo del Parque Natural de las Marismas, con una extensión de flora realmente considerable, es casi única.
SANT MARTÍ D’EMPURIES
Se trata de una población perteneciente a L’Escala.
Su belleza reside en su historia, casi privada para la reducida población de la zona. Un total de 60 habitantes que disfrutan de un paraíso en plena Costa Brava.
Un lugar de ensueño. Paraje en el que descansar mientras se disfrutan de las vistas que ofrece la situación, en lo alto de una colina que se abre al mar.
Lugar que inspiró al creador del famosísimo Capitán Trueno, ofrece numerosos puntos históricos que visitar; uno de ellos, a pocos metros del casco urbano, es el yacimiento arqueológico de Ampurias. En él, las antiguas ciudades griega y romana le aportan un encanto indescriptible.
LLANÇÁ
Terminamos nuestro periplo por el Alto Ampurdán poniendo la meta en esta preciosa localización.
Nos situamos ahora en el punto más céntrico: Plaza Mayor. Aquí, la historia habla sola.
Como si de un vigilante se tratara, la Torre Románica, construida hace ya ocho siglos, se levanta imponente junto a la iglesia, que en época de guerra sirvió como refugio del que hoy es posible contemplar su entrada.
El paisaje cierra este regalo para los sentidos, mezclando tierra y mar en una combinación perfecta. Tierra, con el islote y el Parque Natural del Cap de Creus protegiéndolo, y mar. Mires donde mires: El Mediterráneo ante ti.
Un destino perfecto para enamorarte de Girona.