Esta comunidad del noroeste de España ha sido una de las más importantes a lo largo de la historia gracias a su cercanía con Europa y su apertura al Mediterráneo.
Un lugar que merece la pena visitar por su trayectoria pero también porque alberga en su territorio casi una veintena de los parques más bonitos de España. Hoy vamos a descubrir alguno de ellos.
Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici
Este parque se sitúa en la parte central de los Pirineos entre las comarcas de la Alta Ribagorza, el Pallars Sobirà , el Pallars Jussà y el Valle de Arán. Está formado 2 valles y 2 zonas muy distintas entre sí pero colmadas ambas de lagos de origen cuaternario.
Con zona atlántica y zona mediterránea, los prados y las especies que allí habitan son muy diversos. Aunque está abierto durante todo el año, el verano es la mejor época para descubrirlo mediante numerosos senderos adaptables a todos los niveles de dificultad y conectados entre sí por la ruta de Gran Recorrido 11, que atraviesa un parque con múltiples opciones.
Parque Natural del Alto Pirineo
Entre las comarcas del Pallars Sobirá y el Alto Urgel. Cerca de 70000 hectáreas de terreno lo convierten en uno de los más extensos de Cataluña. Los valles que recorren este parque te dan la oportunidad de ascender hasta la Pica d’Estats o al Montxeixo pero también puedes quedarte por las faldas haciendo rutas en las que descubrir la magia natural, cultural e histórica que desprende.
Por los Pirineos se pueden hacer numerosos recorridos pero hemos querido destacara la Travesía de La Magia del Pallars. Con una duración de 3 días, atravesarás el Valle de Siarb mientras descubres grandes praderas, bosques de pinos y miradores mágicos.
El Cabo de Creus
En este punto de tierra parece que las montañas y el mar se unen en un paisaje idílico. Hace 20 años se convirtió en el primer parque marítimo-terrestre de la Península y no es para menos como puedes comprobar en alguna de sus rutas. En ella rodearás grandes acantilados que se funden en uno con el mar, montañas, dólmenes y un faro que se alza en su punta. Una punta de España que es admirable.
Parque natural del Delta del Ebro
En Tarragona y en su zona más meridional, encontramos este parque en la desembocadura del río más caudaloso de España y del que recibe el nombre. Con casi 8000 hectáreas alberga este título desde 1983.
Los sedimentos que deposita en las orillas provienen del sistema Ibérico, la Cordillera Cantábrica y los Pirineos, es decir, de todo lo que recorre en su largo camino por ello no es de extrañar que estos restos se amontonen en una superficie de más de 320 kilómetros cuadrados.
Además, su inclusión en el mar se extiende por más de 22 kilómetros en forma de una flecha perfectamente dibujada siendo el tercer delta de más extensión en el mar Mediterráneo.
Parque Natural de la Serra de Montsant
Indicado especialmente para practicar escalada en sus numerosos y empinados barrancos y desfiladeros como el de Fraguerau, su superficie se extiende entre más de 9000 hectáreas que pertenecen a la Sierra del Montsant.
La vegetación, de influencia submediterránea y eurosiberiana, provoca que haya especies vegetales y no típicas de la comunidad mezcladas entre otras como las encinas. Podrás disfrutar de barbacoas controladas en él tras haber realizado alguna ruta de senderismo que se adapte a tu nivel.
Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa
Por último no podríamos dejar de hacer referencia a este parque que es uno de los más importantes en cuanto a volcanes peninsulares, siendo uno de ellos, el Croscat, el más grande y joven de España. Sus grandes chimeneas se funden entre bosques de hayas, robledos y alcornoques por lo que podrás realizar rutas a lo largo de todo el año disfrutando de paisajes que te dejaran sin palabras.
Numerosas opciones se presentan ante ti para disfrutar de unos días en plena naturaleza en esta comunidad del noreste español. En sus cimas descubrirás vistas que nunca se te borrarán y compartir ese momento rodeado de tus seres queridos no tiene precio.