¿Aventurero, amante de la naturaleza y deportista? Si te reconoces en cualquiera de estos tres adjetivos, estamos de suerte porque lo que hemos preparado hoy, te va a encantar.
Ya hemos contado muchas posibilidades de conocer España a fondo, pero nunca lo hemos hecho de la manera que vamos a hacer ahora.
Te vamos a mostrar una forma diferente de explorar algunas zonas de nuestro país con la única compañía de la biclicleta. Atento, porque estás a punto de descubrir las mejores rutas cicloturistas de España.
¿Cicloturistas? Pues sí, porque hay muchos amantes de este deporte, porque nos hemos dado cuenta de que es un tipo de turismo que está creciendo mucho, y porque nunca está de más, hacer algo de deporte con el mejor escenario posible.
¡Ponte el casco que empezamos!
Ruta Transpirenaica
Es una de las más duras, contando en un trayecto de unos 1.000 kilómetros, con grandes desniveles por el escarpado paisaje que recorre.
Cruza todos los Pirineos; donde os encontraréis con unos cuatro puertos de montaña con las mejores vistas que pudiérais encontrar en el camino.
El punto de arranque suele ser cerca del Cabo de Creus, en la población de Llança, donde van viniendo kilómetro tras kilómetro los paisajes que van del Mediterráneo al Cantábrico, hasta llegar a la meta, que se encuentra en Hondarribia.
Para hacer esta ruta hay que estar muy bien preparado, y por supuesto, muy motivado para disfrutarlo a fondo.
Camino de Santiago
Como lo oyes. Seguro que te imaginas peregrinos cargados con sus mochilas y ampollas en los pies bajo un calor de justicia.
Pues bien, tienes que saber que hay muchas más formas de hacerlo, y una de ellas es en bicicleta. De hecho, si no tienes mucha experiencia en esta nueva modalidad, te recomendamos que te inicies por estos senderos ya que están perfectamente señalizados, y además puedes elegir la ruta que quieras en base a los paisajes, o a tu fondo físico.
Está la opción del Camino Francés, un recorrido de más de 700 kilómetros. El siguiente, la Vía de la Plata, uno de los más bonitos, aunque de los más largos, con 1.000 kilómetros.
Hay dos más; el Camino del Norte, a más de 800 kilómetros; o el portugués, que sale desde Lisboa en un camino de unos 630 kilómetros.
El Camino del Cid
Uno de los recorridos con más referencias históricas y culturales de la zona.
Tiene ese nombre ya que en sus 700 kilómetros, los intrépidos turistas pasan por los puntos de referencia para la vida de Don Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador.
Une la provincia de Valencia, con la de Burgos, teniendo en especial referencia la población de Vivar del Cid.
Además, ofrece varios tipos de rutas, dependiendo tanto de tu forma de pedalear, como de tu capacidad física. Aunque sea cual sea tu ruta, podrás disfrutar de paisajes como el del Parque Natural del Alto Tajo, o la Sierra de Albarracín.
Ruta Transándalus
Si buscas tranquilidad y buen tiempo, no cabe duda de que ésta es tu ruta.
Tiene un recorrido de más de 2.300 kilómetros que te permitirán conocer cada uno de los espacios mágicos y naturales de Andalucía.
No tiene punto de partida, ni de fin. Es una ruta de trazado circular, por lo que puedes engancharte a ella desde cualquiera de sus provincias, teniendo por seguro que te acompañarán los paisajes más bonitos de la Comunidad.
Además, otra de sus particularidades es que se creó a partir de una iniciativa de amantes de la bici de montaña, que consiguieron casi en su totalidad, realizar caminos evitando las carreteras, y por tanto, cualquier peligro para que viajes seguro.
Ruta Vía Verde del Aceite
Sin movernos de Andalucía, nos encontramos con una última ruta en la que la naturaleza será el escenario elegido para conocer a fondo cada uno de sus rincones.
Son más de 200 kilómetros los que estructuran este recorrido en el que se empieza en Jaén, y se acaba en Alcaudete, sin dejar de mencionar lugares de paso como Torre del Campo, Torredonjimeno, o Martos.
Todo este recorrido, que cuenta con un desnivel de unos 957 metros, viene reforzado por el olor a olivos que hay durante el recorrido.
Sin duda, una de las rutas más bonitas.
Como ves, hay muchas formas de hacer turismo y ésta, es una de las más divertidas, además de ser de las más sanas.
No te lo pienses más e iníciate en esta aventura de las dos ruedas y el turismo rural.