Peu del Riu

Bonito apartamento vacacional para 4 personas ubicado en el complejo Pleta Peu del Riu, situado en los alrededores del pueblo de Soldeu, en el corazón de los Pirineos.

Los huéspedes de este alojamiento podrán disfrutar de lo siguiente:

• Un amplio dormitorio doble, con una cama de matrimonio y un armario de gran tamaño para almacenar, además de mantener en orden los enseres que trajésemos durante nuestra estancia.

• En el enorme salón encontramos un conjunto de comedor para 4 personas que se sitúa justo en el centro. Todo un lateral de la estancia está poblado por un confortable sofá tresillo y una cómoda chaise-longe convertible en cama de matrimonio desde los que podremos ver tranquilamente la televisión que se halla en el rincón de la sala junto a la puerta de entrada.

• La cocina, que se dispone en un bloque de mobiliario único en la pared contraria del salón por donde se entra a la vivienda, contiene todo el equipamiento electrodoméstico necesario, además de una variada selección de menaje del hogar.

• El baño, también bastante amplio como el resto de las estancias de la vivienda, dispone de los elementos sanitarios propios de un aseo, además de una bañera.

Los Estanys de Juclà, en el valle de Inclés, en los alrededores del pueblo de Soldeu, son una de las paradas de obligada visita de la Alta Ruta Pirenaica (ARP), un trazado senderista de alto nivel que va desde el mar Cantábrico al Mediterráneo. En todo ese recorrido es casualidad que justamente se encuentre algo tan valioso justamente junto a la ubicación en la que nos encontraremos y es algo que deberíamos aprovechar.

El precioso Valle de Inclés, de tipo glaciar, es un paraje natural de alto valor cultural, tanto es así que en él podremos visitar el Centro de Interpretación del Valle de Inclés, donde nos podremos apreciar a través de los materiales divulgativos allí dispuestos y con la ayuda de los guías, la verdadera importancia de este territorio a todos los niveles.

También podemos aprovechar nuestra privilegiada situación para visitar el segundo puente tibetano más largo del mundo, con 603 metros de largo y una altura sobre el suelo del valle de 130, donde podremos poner a prueba nuestros nervios así como los límites de nuestro vértigo.