Apartamento Entreplayas

Precioso apartamento vacacional para 6 personas, en pleno centro de Gijón, en la zona de su casco urbano que se comprende entre sus dos playas urbanas de Arbyal y Poniente, en el característico barrio de El Natahoyo.

Este alojamiento brinda para uso de sus huéspedes las siguientes instalaciones:

• 3 dormitorios de tamaño y capacidad dobles, 2 de ellos con camas de matrimonio y el que resta con un par de camas individuales gemelas. Todos ellos tienen orientación exterior y con las amplias ventanas de que disponen, aprovechan la iluminación natural que se puede aprovechar en estas latitudes.

• En el espacio unitario en que se incluye el salón, encontramos un sofá de varias plazas de asiento situado frente a una gran pantalla de televisión instalada en la pared de en frente, componiendo un pequeño centro de entretenimiento audiovisual.

• Tras el respaldo del sofá se extiende la amplia encimera de una cocina plenamente equipada con un completo equipamiento electrodoméstico, integrado en un mobiliario de un gusto exquisito, donde se organizan los elementos de una nutrida selección de menaje del hogar. Entre el uno y la otra se encontraría un precioso conjunto de comedor de diseño que puede dar asiento a los 6 ocupantes de la casa al mismo tiempo.

• Los 2 baños de los que dispone la vivienda son completos, con una cabina de ducha de formato abierto y unos sanitarios básicos, que han sido escogidos con un diseño que resulta regalar paz a todos los sentidos.

Si lo que buscamos es conocer esta preciosa ciudad dentro de su casco histórico deberíamos acercarnos al característico barrio de Cimadevilla lo cual fue el origen romano de la población, de lo cual no se conservan restos concretos, pero si el carácter obrero y pesquero de tiempos más recientes. Transitar por sus pequeñas callejuelas resulta un verdadero placer para el visitante, donde cada rincón se presenta ante los ojos del foráneo como una instantánea digna de una postal, por no hablar de que en ellas encontraremos restaurantes y sidrerías donde poder alegrar nuestros paladares degustando los manjares típicos de esta tierra y sus mares.

Como elementos visitables característicos podremos acercarnos al cerro de Santa Catalina, donde encontraremos sus antiguas baterías marítimas que defendían la ciudad de los posibles ataques venidos por mar. Da la casualidad de que al igual que muchos otros enclaves militares valiosos, también este se constituye como un mirador de excepción desde el que obtenemos una de las mejores panorámicas de la ciudad.

Por último, podremos visitar El Elogio del viento, una obra del célebre escultor Chillida, que de la misma manera que en San Sebastián pasa con el Peine del viento, siendo obras de factura reciente, puesto que se trata de esculturas de arte moderno, se ha convertido en uno de los iconos principales de la ciudad. Este mastodonte de hormigón de 10 toneladas es una obra para disfrutar no solo con la vista sino con todos los sentidos, a excepción por supuesto del gusto, el cual saciaremos sobradamente en el resto de la ciudad.