Albergue La Cañadilla

Este albergue rural se encuentra situado en el municipio conquense de Uña, a los pies del río Júcar y el Parque Natural de la Serranía de Cuenca, por lo que se puede disfrutar de unas vistas espectaculares desde nuestras instalaciones.

Y es que se enmarcan en unos 10.000 metros cuadrados privados en los que se han construido pequeñas cabañas. Hay en cada una de ellas 3 literas y por lo tanto podrán acoger hasta 6 personas. Con lo que el albergue tiene espacio para un máximo de 42.

Aunque también hay preparada una zona para acampadas en las que se podrán quedar hasta 125 personas. 

Para las comidas contamos con una cocina de las que nos encargamos nosotros mismos y en la que os ofrecemos la mejor calidad desde nuestras manos. Y otra para los que os hayáis decidido por alojamiento exclusivo, totalmente equipada y de la que os encargaréis vosotros mismos.

Contamos con 2 comedores, uno interior con plazas para 50 comensales y otro exterior para 100. Asimismo, hay cabañas que son únicamente baños-aseos, separados por sexos y en los que hay 14 duchas.

Este es un lugar estupendo para grupos que quieran realizar actividades en un entorno alejado de la grandes ciudades. Por lo que también disponemos con salas que pueden utilizarse para diferentes fines. Podéis dar clases, hacer talleres, juegos...

En las grandes explanadas hay un campo de fútbol, canastas de baloncesto y red para voleibol. Así como porches con mobiliario de jardín y junto a barbacoa.

El municipio de Uña cuenta con algo menos de 100 habitantes. Y aunque pertenezcamos a él nos encontramos un poco alejados del mismo, pues esta es una zona caracterizada por grandes explanadas sin construcción y con mucha naturaleza. 

Esto se debe a que nos situamos en el Parque Natural de la Serranía de Cuenca, con una gran diversidad en su flora, donde está el río Júcar y el embalse de la Toba, el cual ofrece un paisaje envidiable. 

Estamos muy cerca de la Ciudad Encantada, un entorno también natural con formaciones rocosas que emulan animales y otras figuras, construidas durante siglos por la erosión de las aguas.